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¡Hola! Empieza aquí, por favor.

Pensamientos que no alcanzan para cuentos, parte 0: Inicio.

Hola, una de las pocas personas que probablemente vaya a leer esto, mi nombre es CosmosCrinum, ¿por qué ese nombre? Sin razón específica, simplemente me pareció  interesante. Como dato, son nombres de géneros de plantas que encontré en internet alguna vez hace mucho tiempo. No tengo muchos años de vida como me gustaría decir, pero tampoco son tan pocos, valga la redundancia. Hace un par de meses empecé una nueva etapa de mi vida que no ha estado tan mal como creí que sería, por lo que no me puede quejar mucho en ese sentido. No puedo decir mucho de mí, más que puedo considerar que me gusta leer y escribir, pero solo de vez en cuando, ya que me da por temporada o cada que me llega la inspiración, lo cual no llega tan seguido como me gustaría. Dejando eso de lado, empecé este blog a forma de poder subir las cosas que escribo a algún lugar y quizás poder llegar a alguien por ahí, aunque no estoy muy seguro de si alguien llegará a leer esto, pero, de todas formas quise intentarlo. La idea

Pensamientos que no alcanzan para cuentos, parte 1: Café.

Hoy, me quemé al tomar café. Lo sé, es mi culpa, debería haber soplado más antes de haber llevado el vaso de plástico a mi boca, pero, en mi defensa, hacía frío, mis manos templaban y creía que los 2 minutos que llevaba soplando habían sido más que suficientes. Claramente me equivoqué. Lo peor, no es la primera vez que me pasa. No sé si tú te has quemado tomando café también, pero no pienses en esas quemaduras que se van después de un rato sin que te des cuenta, sino en esas que llegan hasta la garganta, probablemente hasta sientas una sensación extraña por la parte del estómago, eso significa que te quemaste hasta ese lugar (creo que es por eso, cabe aclarar que esto es desde mi experiencia propia). ¿Pude haber escupido al café? Sí. ¿Lo hice? Claramente no, porque soy lo medianamente imbécil (¿o quizás lo suficientemente?) como para tragarme el café aun sabiendo lo que me va a ocurrir más tarde. La molesta sensación en la punta de la lengua, la rara sensación al hablar y ...no el dolo

02. Huye.

Ganas de correr. Simples ganas de correr que llegan de la nada. Una sencilla sensación de que querer levantarse, salir y correr, más bien, huir. Cada vez que llueve, quiero huir. Levantarme de mi cama, dejar todo de lado y correr a la puerta sin escuchar como mi familia mi grita que no salga, pero no prestarles atención y salir de igual forma. Llegar a la calle y sentir el agua mojarme. Escucho el agua chocar contra el suelo. Es relajante. Es tranquilo. Solo me dedico a mirar el cielo. El cielo gris y triste, pero yo no lo veo triste. No me da tristeza el cielo gris. Me da paz, pero también ganas de llorar. Extrañamente, no son ganas de llorar de tristeza. Solo…llorar. No veo al cielo gris como algo triste, más bien, lo veo como algo libre. Me da esa sensación de libertad. Nada detiene al cielo gris al llover. Puede llover por un par de minutos, durante algunas horas, a lo largo de varios días, quizás tres semanas, a lo mejor un mes, puede durar cuanto tiempo quiera. Cada vez que lluev

01. Cambios por año nuevo.

23:59. 31 de diciembre de 2020. Todos están felices por una única razón, creer que pueden comenzar de cero solo porque se trata del nuevo año. 00:01. 01 de enero de 2021. Todos celebraban, todos sonreían, hasta que se dieron cuenta que todo seguía siendo igual que hace dos minutos. Viernes, 01 de enero de 2021.